Los KUKAS en contra del préstamo del FMI: afirman que la impresora de Amado Boudou era más rápida y se podía manotear más fácil
BUENOS AIRES – Mientras el ministro de Economía recita tasas de interés en sánscrito y el presidente habla en inglés con subtítulos, un sector del kirchnerismo más vintage ha levantado la voz contra el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Según afirman, “la deuda externa está sobrevalorada” y sería preferible volver a métodos patrióticos de emisión directa y distribución artesanal, como en los tiempos dorados del Ciccone Style.
REAL POLITIK
Por Marcial del Pino – Especial para Madrid.ar
5/5/20252 min read


BUENOS AIRES – Mientras el ministro de Economía recita tasas de interés en sánscrito y el presidente habla en inglés con subtítulos, un sector del kirchnerismo más vintage ha levantado la voz contra el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Según afirman, “la deuda externa está sobrevalorada” y sería preferible volver a métodos patrióticos de emisión directa y distribución artesanal, como en los tiempos dorados del Ciccone Style.
"La impresora de Amado era más nacional y popular", afirmó un exfuncionario con pedido de captura en suspenso. “Vos tenías una idea, una factura, una cooperativa y al rato ya tenías un fajo de billetes. Con olor a patria, no a Bruselas”, agregó con nostalgia.
La crítica apunta a la lentitud burocrática de los préstamos internacionales. “El FMI te da la plata con condiciones. Amado te la daba con un PowerPoint y un apretón de manos en una parrilla de Palermo. Era otro país”, rememoró un dirigente de La Cámpora mientras intentaba pagar el café con pesos y una sonrisa revolucionaria.
En redes sociales, el hashtag #VuelveLaCanon se hizo tendencia, en homenaje a la famosa impresora que supo estampar billetes con la misma eficiencia con la que hoy se imprimen flyers de pizzerías barriales.
Desde sectores más duros, se pidió la exhumación simbólica del “modelo Boudou”: emisión monetaria sin culpa, licuación sin anestesia y distribución directa con GPS emocional. “Lo importante no era que los billetes valieran, sino que circularan con alegría”, dijo un ex asesor económico hoy dedicado al trueque espiritual.
El FMI, por su parte, agradeció la mención y declaró que “en ningún momento se consideró dotar al gobierno argentino de impresoras”, aunque admitieron estar preocupados por el alto consumo de papel en Casa Rosada.
Fuentes no confirmadas indican que una facción del kirchnerismo estaría trabajando en un prototipo llamado “Plan Epson 6.7”, que permitiría imprimir pesos con aroma a choripán y holograma de Néstor. Sería presentado como parte de una gira federal bajo el lema “Soberanía es imprimir lo que no tenés”.
Mientras tanto, el pueblo espera. Entre la licuadora del Fondo y la Canon de Amado, muchos argentinos sólo quieren que no se les derrita el sueldo antes de fin de mes.
Los KUKAS en contra del préstamo del FMI: afirman que la impresora de Amado Boudou era más rápida y se podía manotear más fácil
Por Marcial del Pino – Especial para Madrid.ar