El proveedor de comida, principal sospechoso por los 470 kilos de cocaína: “Al parecer se confundio de merluza"
🚢 En lo que ya se perfila como el sketch de humor involuntario más oscuro del año, el Gobierno nacional —a través de la ministra Patricia Bullrich— informó que la investigación por los casi 470 kilos de cocaína incautados en un buque rumbo a Ámsterdam apunta con fuerza al proveedor de comida y a unos pobres tripulantes con cara de susto.
POLILADRON
Esteban LApiñata
5/4/20252 min read


Sí, leyó bien: el cargamento de cocaína apareció mágicamente en un barco amarrado en el puerto de una empresa cuyos directivos fueron presos por defraudación y malversación de fondos del Estado, pero tranquilos, que ya encontraron al culpable: el proveedor de las viandas.
“No descartamos que haya confundido ‘merluza’ con ‘mercadería’, pasa en las mejores familias”, deslizó una fuente de la Prefectura mientras limpiaba la sangre del ojo de tanto hacerse el boludo.
Fuentes extraoficiales aseguran que el proveedor, conocido como “Charly el del puré con formol”, habría aprovechado un descuido en la seguridad portuaria —que casualmente suele estar tercerizada por la misma empresa dueña del barco— para meter 470 kilos de cocaína en envases tupper marca Fantoche.
“Es ridículo pensar que un proveedor de milanesas tenga acceso a los containers sin que nadie más lo vea”, opinó un sindicalista del puerto, justo antes de ser trasladado a la comisaría por portar dignidad.
La empresa en cuestión —cuyo nombre no se menciona pero tiene más causas que empleados— fue noticia años atrás por desviar fondos públicos destinados a obras fantasmas, aunque para este caso se la considera una víctima colateral del apetito narco.
“¿Quién va a sospechar de una empresa que ya robó al Estado? El verdadero peligro está en los proveedores con changuito”, aclaró la ministra Bullrich entre sonrisas que no sabía si eran de nervios o de sarcasmo.
Mientras tanto, los tripulantes detenidos aseguran que ellos pensaban que el polvo blanco era una nueva variedad de queso rallado europeo. Uno incluso declaró que “en la cocina del barco se usa de todo, menos sentido común”.
Desde el Gobierno aseguran que irán hasta las últimas consecuencias, siempre y cuando no impliquen mirar para arriba. La opinión pública, por su parte, alterna entre la indignación y la risa, preguntándose si no sería mejor que directamente nos digan que el narcotráfico también lo maneja un monotributista.
El proveedor de comida, principal sospechoso por los 470 kilos de cocaína: “Al parecer se confundio de merluza"
🚢 En lo que ya se perfila como el sketch de humor involuntario más oscuro del año, el Gobierno nacional —a través de la ministra Patricia Bullrich— informó que la investigación por los casi 470 kilos de cocaína incautados en un buque rumbo a Ámsterdam apunta con fuerza al proveedor de comida y a unos pobres tripulantes con cara de susto.